El proyecto Ictineu, uno de los primeros proyectos en los que ha colaborado la Fundación Caja de Ingenieros, se ha posicionado actualmente como uno de los fabricantes mundiales de baterías de litio, tal y como publicó ayer La Vanguardia en el artículo Ictineu, del submarino a las baterías de litio.

La compañía nació en 2007 con el objetivo de fabricar el tercer submarino catalán- después de que el ingeniero catalán Narcís Monturiol fabricara el primero y el segundo hace 150 años-. Seis años despúes de su creación, pudo conseguirlo gracias a las diferentes ayudas públicas, iniciativas y campañas de micromecenazgo en las que la Fundación Caja de Ingenieros colaboró durante más de 3 años, en su apuesta por la ingeniería y la innovación. 

Paralelamente, la compañía Ictineu ha impulsado la fabricación de baterías de litio, patentadas en 2012 para la producción de su submarino, que son 5 veces más ligeras que las baterías de plomo y capaces de aumentar 10 veces el tiempo de recorrido bajo el agua. Una negocio que la ha posicionado como un referente a nivel mundial.