¿Cómo gestionar los gastos imprevistos?
Todos somos víctimas ocasionales de emergencias que pueden desestabilizar nuestras finanzas.
Según el Instituto Nacional de Estadística, el año pasado, el 35,5% de los españoles ni siquiera tuvo la suficiente capacidad para hacer frente a los imprevistos.
Fondo de emergencias
La manera más eficaz de reducir el impacto negativo de las emergencias es contar con un colchón económico.
Evita la necesidad
de endeudarse.
Aporta seguridad.
Ayuda a planificar y alcanzar
las metas financieras.
Refuerza el hábito
de ahorrar.
¿Cómo puedes conseguirlo?
Calcula tus ingresos e identifica tus gastos fijos, variables y extraordinarios.
Puedes automatizar una transferencia mensual para que te resulte más sencillo.
La situación ideal es que tu fondo de emergencia te permita cubrir entre 3 y 6 meses de gastos,
de tal manera que, si tus gastos mensuales son de 1.250 euros, dispongas de al menos 3.750 euros
para enfrentarte a los imprevistos.
Es recomendable que:
Te ofrezca cierta rentabilidad
para amortiguar la inflación.
Sea de acceso rápido y sencillo
para contar con tu dinero de manera inmediata.
Se encuentre separado de tus cuentas de uso diario para evitar recurrir a él cuando no sea imprescindible.
Seguros
Los seguros también te pueden ayudar a hacer frente a los imprevistos a cambio de pequeñas cantidades de dinero periódicas.
¿Qué seguros deberías contratar?
Eso depende de tus necesidades específicas. Algunos de los más frecuentes son:
Seguro de vida
Proporciona estabilidad
financiera a los beneficiarios
en caso de fallecimiento.
Seguro del hogar
Cubre los daños que pueda
sufrir la vivienda
y tus pertenencias.
Seguro médico
Te permite acceder
a asistencia sanitaria
en cualquier momento.
Seguro de coche
Es obligatorio.
Cubre los riesgos relacionados
con la conducción.
Aunque pagar las pólizas puede ser molesto, sus coberturas
en caso de emergencias superan con creces la cantidad de dinero aportado.
En conclusión
Los imprevistos son inevitables, pero podemos disminuir su impacto negativo con una buena planificación.
Crea un fondo de emergencia que te ayude a sobrellevar las emergencias manteniendo tu estilo de vida
y contrata seguros para hacer frente a los imprevistos de mayor cuantía.
