El CdE ODS Impact ISR es un fondo de impacto (cotizado) que invierte en compañías que aporten soluciones a los retos que nos plantean los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y da prioridad a las empresas cuyo negocio está contribuyendo al cumplimiento de dichos objetivos.

El fondo aplica criterios de inversión socialmente responsables centrándose en compañías que impacten de forma positiva en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y da prioridad, sin descartar cualquiera de los restantes 17 objetivos, a estos tres:

• ODS 4: Educación de calidad
• ODS 6: Agua limpia y saneamiento
• ODS 9: Industria, innovación e infraestructura

Además, valoramos positivamente que las compañías en cartera sigan unos estándares mínimos de criterios ISR (inversión socialmente responsable) y hayan suscrito el Pacto Mundial de las Naciones Unidas mediante el cual las empresas adoptan y/o promulgan, dentro de su esfera de influencia, un conjunto de valores fundamentales en las áreas de derechos humanos, normas laborales, medioambiente y anticorrupción. En el caso de la renta fija gubernamental, han de ser países del top-30 del índice SDG, el cual mide el cumplimiento de los ODS según países, o entidades supranacionales con proyectos de impacto.

Respecto al proceso de inversión, nuestra estrategia persigue seleccionar compañías cuyos productos o servicios tengan un impacto directo en los ODS, pero que, además, sean líderes en su sector, y negocios atractivos desde el punto de vista fundamental, que gocen de elevados estándares extrafinancieros y que posean ventajas competitivas sostenibles y estables. Esto se concreta en factores como el efecto red, el coste de cambio, la ventaja de costes, las patentes o el poder de marca, entre otros. Desde un punto de vista cuantitativo, destaca la preferencia sobre empresas capaces de crecer en ventas y flujos de caja a lo largo del tiempo de una forma consistente y sostenible, que obtengan unos retornos sobre los recursos empleados mayores al coste del capital y que tengan un bajo o controlado apalancamiento.

En términos ISR, el CdE ODS Impact cuenta con la máxima calificación de sostenibilidad por Morningstar, con lo que se reconoce, así, la calidad en las métricas ASG de las compañías en las que invierte y la excelencia en la gestión de sus riesgos y oportunidades de ASG. Además, lidera el ranking de impacto sostenible de MSCI, por encima de un total de 1.837 competidores.

Con todo, el impacto al cierre de diciembre en los ODS 4, 6 y 9 era más de dos tercios del patrimonio. Además, también evaluamos el grado de alineamiento en cada uno de los ODS, y el fondo está posicionado en muy alineado o alineado en la mayoría de casos. En el caso de la cartera de renta fija, queremos destacar que priorizamos las emisiones de deuda sostenible, las cuales, al cierre de diciembre, representan un 43 % de la cartera de renta fija, lo que equivale a un 16 % de la totalidad del patrimonio del fondo. El conjunto de las emisiones son bonos verdes exceptuando una emisión social de BBVA, la primera emitida por una entidad financiera privada en Europa, cuyos fondos se destinarán a mitigar los severos impactos económicos y sociales causados directa o indirectamente por la pandemia COVID-19. Finalmente, matizamos que todas las emisiones del fondo son verificadas y auditadas de forma independiente para asegurar la trazabilidad de los recursos y que estos se han usado de acuerdo con el marco definido.

Para finalizar, recordamos que el CdE Impact ODS es un fondo con vocación de renta variable mixta internacional, con una exposición a renta variable de un 50 % como máximo, pudiendo ser inferior al 30 % a partir de 2028. El resto estará invertido en valores de renta fija de compañías con elevada calidad crediticia y solvencia. La duración máxima de la cartera de renta fija será de 8 años, coincidiendo con el año 2030, fecha en la que se reevaluará el grado de consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).